La inmersión en Calafató se realiza a una profundidad máxima de 12 metros sobre praderas de posidonia y pequeños arrecifes de roca natural. Por las características del agua y su poca profundidad, sumergirse en Calafató permite disfrutar de unos juegos de luz y color espectaculares que transmiten una gran sensación de paz y tranquilidad bajo el agua.
La salida se realiza desde la playa de Cala Calafató, un idílico rincón que cautiva a los visitantes. A ambos lados de la cala podremos encontrar formaciones rocosas con pequeñas cavidades no accesibles. En nuestra inmersión encontraremos también la Cova del Dofí, una pequeña cavidad accesible donde hace bastantes años un grupo de buceadores colocaron una pequeña estatua de un delfín de bronce de unos 50 cm. Antes de llegar a la cueva, descubriremos también una formación rocosa conocida popularmente como El Faralló.
La playa Cala Calafató desde la que se inicia la inmersión es una aislada playa de arena dorada de unos 100 metros de longitud y un ancho aproximado de 40 metros, reconocida internacionalmente desde hace varios años con la Bandera Azul de la Fundación Europea de la Educación Ambiental por la calidad de sus aguas y el respeto al medio natural.
